15 de octubre de 2024
Hace algunos días se desarrollaron varios eventos mundiales de manera paralela en la sede de la ONU en Nueva York, donde tuve la oportunidad de participar, representando a la red de Chile, de Pacto Global y a nuestras empresas socias. La Cumbre de Líderes de Pacto Global de Naciones Unidas que se realiza cada año, este 2024 estuvo marcada por un llamado a una acción colectiva eficaz y un compromiso ineludible de las empresas, con metas específicas en cinco áreas concretas para avanzar en los ODS, que llevan un significativo atraso. En ese contexto, la ciencia, la tecnología, la innovación, la inteligencia artificial y la cooperación conformaron pilares fundamentales para plantear soluciones viables y avanzar hacia un futuro más equilibrado.
La Cumbre del Futuro, en el marco de la Asamblea General de Naciones Unidas, adoptó
el Pacto para el Futuro, acuerdo que incluye un Pacto Mundial Digital y una Declaración
sobre las Generaciones Futuras. Se establecieron estándares para el desarrollo
sostenible, la paz y la seguridad, y los derechos humanos. Así, los líderes mundiales se
comprometieron a llevar a cabo 57 acciones concretas para materializar sus intenciones,
destacando el compromiso con el derecho internacional y la necesidad de una reforma de
las instituciones multilaterales.
Se abordó también la financiación del desarrollo sostenible y la necesidad urgente de
reformar la arquitectura financiera internacional para enfrentar los desafíos globales y
cumplir con la Agenda 2030. Un tema relevante fue el avanzar hacia la paz y la seguridad
internacional, donde se calificó la situación mundial como excepcionalmente peligrosa,
con riesgos de mayores conflictos entre las principales potencias e incluso se visualizó la
posibilidad de una guerra nuclear que alcanzaría niveles alarmantes, empeorando la ya
difícil situación de más del 70% de la población mundial enfrentando algún tipo de
inseguridad alimentaria.
Hubo además un espacio destinado a los jóvenes, reconociendo la importancia de las
generaciones futuras, como agentes de cambio y la importancia de asegurar su
participación en la toma de decisiones y potenciar su creatividad para buscar soluciones
innovadoras.
En la Semana del Clima, se presentaron cifras alarmantes que evidenciaron la necesidad de una acción urgente. Un informe destacó que, de no tomar medidas drásticas, el calentamiento global podría alcanzar hasta 3 °C si se mantienen el ritmo de los compromisos actuales, lo que tendría consecuencias catastróficas para el planeta y podría desplazar a más de 200 millones de personas para 2050. Además, se discutieron estudios que mostraron cómo la tecnología, el buen uso de la inteligencia artificial y la innovación, aparecen como aliados fundamentales en la búsqueda de soluciones en la adaptación y mitigación climática. Por otra parte, se discutieron los avances en energías renovables, con un aumento del 20% en la capacidad instalada global en el último año. Otra medida significativa fue la expansión de las acciones conjuntas de ONU-Energía para cerrar la brecha de acceso a la energía y garantizar transiciones energéticas justas e inclusivas.
Estas cumbres y reuniones de alto nivel enfatizaron la promesa de una nueva era para el multilateralismo, basado en el respeto mutuo y la cooperación y es ahí donde los líderes acordaron reunirse nuevamente en 2025 para evaluar el progreso y ajustar las estrategias como un desafío urgente.