28 de marzo de 2024
Atrás quedaron los días en los cuales la comuna de San Pedro de Atacama debía pasar largas horas sin suministro de agua potable, debido a los constantes problemas en la planta de abastecimiento, dificultades ocasionadas, principalmente, por la antigüedad de la planta y el vertiginoso crecimiento de la población. Hoy está situación se ha revertido con la inauguración del proyecto de “Reposición Módulos de Osmosis Inversa APR”, iniciativa presentada por el municipio local y aprobada por el CORE por un monto de 2 mil 925 millones de pesos (FNDR).
Cuando ocurrió la contingencia por falta de agua potable (marzo 2022) el gobernador regional, Ricardo Díaz, visitó la comuna y recorrió la antigua planta abastecedora, instancia en la que se comprometió a dar solución a la demanda de la comunidad sanpedrina, lo que finalmente ya es una realidad.
Al respecto, el gobernador regional destacó la importancia y urgencia de invertir en los territorios con sentido de equidad, para “terminar con la concentración de recursos solo en Antofagasta”. “Nosotros hemos ido cambiado esa mirada centralista y casi el 60% ha estado priorizado para la provincia de El Loa y por, sobre todo, respondiendo a este sentido de equidad acá donde se produce la riqueza, acá es donde hay que ir invirtiendo, y que mejor que garantizando el acceso al agua. Nosotros hemos hecho una inversión que resolvió un problema que por décadas tenía San Pedro, hoy en día tenemos disponibilidad de agua y ahora los desafíos son otros…tenemos que lograr que haya factibilidad para que así podamos seguir con los otros proyectos que son el hospital y la nueva escuela, y así ir generando mayor desarrollo para la comuna de San Pedro de Atacama “, enfatizó Ricardo Díaz.
Por su parte, el alcalde de San Pedro de Atacama, Justo Zuleta, agradeció los recursos aportados por el Consejo Regional y la gestión del gobernador Díaz y su equipo. “Hubo un compromiso realizado por el gobernador durante un aniversario de nuestra comuna para llegar con la solución técnica después de tanto deterioro en la antigua planta, es por eso, que esta jornada fue tan especial, estamos muy felices, contentos y agradecidos del Gobierno Regional porque este fue el primer verano que pasamos tranquilos sin una emergencia hídrica para la actividad turística y para nosotros mismos que habitamos este territorio. Esperemos que con el complemento de las inversiones se pueda ir mejorando aún más en la calidad del agua”, señaló el edil.
Para la consejera regional por la provincia El Loa y presidenta de la comisión de Obras Públicas, Marcela Carrillo, el nuevo sistema es un gran avance para la comuna.
“Estos 4 módulos vinieron a mejorar mucho la calidad del agua de los sanpedrinos aprovechando mejor el recurso, porque antiguamente con la planta que había se producían muchos problemas de filtraciones entre otras dificultades, porque solo podían recopilar un 50% del agua y con estos módulos se puede aprovechar un 70% de agua, quedando solo un 30% de agua potable de descarte. Todo esto, es un tremendo avance para la comuna porque no debemos olvidar que hasta hace un tiempo atrás San Pedro de Atacama tenía probabilidad de quedar sin agua potable y ahora ese escenario cambió completamente”.
Concluyendo la actividad, Janet Tecay, presidenta del comité de Agua Potable Rural de SPA, indicó a todos los presentes que “este hito para nosotros tiene que ver con que no estamos produciendo más agua, lo que estamos haciendo es mejorar la calidad, mejorar la presión y que ahora la gente cuando abre su llave ve que tiene mucha más agua de la que tenía antes, es decir, ahora el servicio será más eficiente con esta tremenda inversión que hizo el gobierno regional, así que tremendamente agradecida”, expresó la dirigente.
Proyecto
El proyecto fue impulsado por el Gobierno Regional y sus unidades técnicas, contemplando la iniciativa la instalación de módulos de ósmosis inversa para la producción de agua potable en la comuna de San Pedro de Atacama. Además, se instaló una pequeña planta fotovoltaica que requirió obras de infraestructura (eléctrica) necesaria para dejar operativo el sistema de tratamiento de agua cruda, con energía renovable y de manera autónoma.